lunes, 7 de agosto de 2017

Todo te da Miedo? Entra y soluciona tus problema de Miedo



“El amor ahuyenta el miedo y, recíprocamente el miedo ahuyenta al amor. Y no sólo al amor el miedo expulsa; también a la inteligencia, la bondad, todo pensamiento de belleza y verdad, y sólo queda la desesperación muda; y al final, el miedo llega a expulsar del hombre la humanidad misma.”

Aldous Huxley

Desde el punto de vista psicológico, es un estado afectivo y emocional, necesario para la correcta adaptación del organismo al medio, que provoca angustia en la persona. •

Desde el punto de vista social y cultural, el miedo puede formar parte del carácter de la persona o de la organización social.


Se puede por tanto aprender a temer objetos o contextos, y también se puede aprender a no temerlos; se relaciona de manera compleja con otros sentimientos (miedo al miedo, miedo al amor, miedo a la muerte, miedo al ridículo) y guarda estrecha relación con los distintos elementos de la cultura.

Desde una perspectiva más holística y transpersonal, y refiriéndonos no al miedo sano sino al tóxico, el miedo no guarda ninguna relación fisiológica (como reacción de alerta), sino que es un producto de la mente y por tanto aprendido. Este miedo solo existe en nuestra mente, en nuestro imaginario y es alimentado por él.

El miedo es un producto emocional del cerebro. El mecanismo que desata el miedo se encuentra, tanto en personas como en animales, en el sistema límbico del cerebro, que es el encargado de regular las emociones, la lucha, la huida y la evitación del dolor, y en general de todas las funciones de conservación del individuo y de la especie.

Este sistema revisa de manera constante (incluso durante el sueño) toda la información que se recibe a través de los sentidos, y lo hace mediante la estructura llamada amígdala cerebral, que controla las emociones básicas, como el miedo y el afecto, y se encarga de localizar la fuente del peligro. Cuando la amígdala se activa se desencadena la sensación de miedo y ansiedad, y su 5 respuesta puede ser la huida, o la paralización.

El miedo produce cambios fisiológicos inmediatos: se incrementa el metabolismo celular, aumenta la presión arterial, la glucosa en sangre y la actividad cerebral, así como la coagulación sanguínea. El sistema inmunitario se detiene (al igual que toda función no esencial), la sangre fluye a los músculos mayores (especialmente a las extremidades inferiores, en preparación para la huida) y el corazón bombea sangre a gran velocidad para llevar hormonas a las células (especialmente adrenalina). También se producen importantes modificaciones faciales: agrandamiento de los ojos para mejorar la visión, dilatación de las pupilas para facilitar la admisión de luz, la frente se arruga y los labios se estiran horizontalmente.

Freud hablaba de dos tipos de miedo, el miedo real y el miedo neurótico. En el primero existe un peligro real, verdadero, ante el cual corre riesgo la integridad de la persona. Podemos decir que es un miedo racional, de alerta. El otro miedo, el neurótico, es irracional. No hay peligro real que pueda suponer una amenaza para la vida sino que se siente ante algo que no existe, es un miedo que nace de la imaginación y se traduce en sensaciones y sentimientos que paralizan o impiden tomar acciones concretas. En el fondo, en el miedo neurótico, a lo que se tiene miedo es a uno mismo.

Hay entonces muchos ‘grados’ de miedos que conforman una amplia gama de emociones que van desde una leve sensación de alerta y precaución, pasando por la incomodidad, la resistencia y el respeto, hasta llegar al terror y a miedos irracionales, limitantes y paralizantes que pueden desencadenar fobias y ataques de pánico o ansiedad.

EL MIEDO TÓXICO

El miedo que me interesa investigar y al que me referiré a partir de ahora es el miedo tóxico, esos miedos irracionales que nacen y crecen como fantasmas en nuestra mente limitándonos y condicionándonos. Llegamos a este mundo vibrando con el Amor, sin miedos. Los miedos los vamos aprendiendo. Nuestra sociedad es tremendamente represora, el miedo está presente en todos las instituciones: Estado, familia, sistema educativo, religión, etc. Algunas instituciones como el Estado y la religión funcionan con el miedo y sobreviven gracias al temor que infunden.

Se nos enseña a tener “respeto” a nuestros superiores, y el respeto es solo otra manera de nombrar al miedo, es una variante del miedo. Hay teorías que hablan de una “memoria celular”, de información que traemos en nuestros genes al momento de nacer y en la que pueden venir “programas de miedos”. En estos casos la persona tiene más predisposición a sentir miedo y vivir con ellos, pero estos son siempre aprendidos. Los primeros en transmitirnos miedo son nuestros padres ya que son los primeros seres con los que nos relacionamos.

No son concientes que nos están enseñando a tener miedo, lo hacen así porque es lo que han aprendido. Y al enseñarnos a tener miedo no nos están enseñando a amar. Aunque parece que lo que hacen lo hacen por amor, en realidad es por todos los miedos que ellos también tienen. El más grande de esos miedo es el de la pérdida del ser querido, lo que lleva a querer proteger y cuidar del hijo para que nada le suceda. Ideas muy repetidas como “ten cuidado” “no hagas esto que podría sucederte aquello” más que proteger van creando sensaciones de inseguridad y peligro en nuestro subconsciente, que deriva luego en miedos irracionales.

El miedo es como un fantasma que vive en nuestra mente y es alimentado por nuestros pensamientos, cuanto más pensamos más miedo sentimos, más monstruos vemos y más limitaciones tenemos. Como dice Enrique Barrios en Ami, el niño de las estrellas, “la imaginación sin control puede matar de terror, es capaz de inventar un demonio donde solo hay un buen amigo, pero solo se trata de nuestras pesadillas, porque la realidad es sencilla y hermosa, es simple…” Ideas acerca del miedo 

 ¿Cómo superar el miedo?

Con la toma de conciencia y la acción. Es tan simple que no vamos a expandernos mucho en este punto. Una vez que seas conciente de que ese miedo es iracional e inexistente, de nada sirve tomar conciencia si no viene luego la accion. Afrontar el miedo es hacer lo que tienes miedo, ver a quien no quieres ver y estar cerca de donde no quieres estar. Ve y hazlo. Eso es todo!!! es en serio.

Primero hay que darse cuenta que se tiene miedo y aceptarlo. Luego actuar. “Si tienes miedo, hazlo igualmente” 

Susan Jeffers

1 comentario: